Junta Mayor de Cofradías y Hermandades de Semana Santa de Pilar de la Horadada

La historia de la Junta Mayor de Cofradías y Hermandades de Semana Santa de Pilar de la Horadada comienza cuando finaliza la Semana Santa de...

Cofradía de Nuestra Señora de los Dolores y San Apóstol y Evangelista

La imagen de la Virgen de los Dolores fue realizada por el escultor pilareño Don José Sánchez Lozano, tras destruirse durante la Guerra Civil Española en el 1936 toda la imaginería que se encontraba en la Iglesia Parroquial. 

En un principio, se dató esta imagen de 1948, pero se cree que esa fecha es errónea, ya que la imagen fue encargada por Doña Josefa Gálvez García y su marido Don Luis Zapata entre abril de 1939 y febrero de 1941, que fue cuando Don José Illán Bascuñana, el entonces cura párroco, abandonó Pilar de la Horadada.

Existe un testimonio oral de Soledad López Galiana y una imagen fotográfica de que la primera procesión de Domingo de Pascua que se celebró en el pueblo, se tuvo que utilizar a la Virgen del Pilar, patrona de Pilar de la Horadada, sin el niño, como Virgen Dolorosa para que se encontrara con el Santísimo resucitado.

La Cofradía que venera la imagen de Nuestra Señora de los Dolores, fue la más precoz de todas, congregándose poco después del fin de la Guerra Civil. Josefa Gálvez García, quien fuera la que encargó la imagen al escultor, fue su camarera, es decir, la persona encargada de preparar a la Virgen de los Dolores para los desfiles procesionales durante años, hasta que fue sustituida por Josefina Albaladejo Galiana, y ya en 1967, cuando se formó oficialmente la cofradía, se nombró camarera y a la vez presidenta de la misma a Purificación Pérez Villaescusa, con la ayuda de su marido Manuel Gallego Sáez.

Durante los años que Puri fue presidenta de la cofradía, se hizo un importante cambio a la imagen de la Dolorosa. En un principio se había concebido una imagen de la Virgen de la Soledad, por eso tiene su mirada hacia abajo y fue realizada con las articulaciones fijas y las manos entrelazadas en el pecho. Por la voluntad de los cofrades, se cambiaron las manos y se articularon los brazos para que el Domingo de Pascua, durante la Procesión del Encuentro, pudiera abrirlos y recibir a su hijo resucitado.


Hasta el año 1998, la imagen de la Virgen de los Dolores, participó en dos salidas procesionales: Viernes Santo, en el Santo Entierro y el Domingo de Resurrección, en la Procesión del Encuentro. Hasta entonces el trono desfilaba sobre ruedas y llevaba una barra para cambiar de dirección. Llevaba incorporadas unas tulipas con lámparas, que se alimentaban con un generador de electricidad, el cual se mantenía alejado del trono por seguridad, iba unido a un cable y montado sobre un carrito con ruedas, hasta que se realizó un trono nuevo en 1998, por Antonio Pérez, "el Vinagre".

Durante los años en que el trono se llevaba a ruedas, varios miembros de la cofradía se encargaban de ello e iban ataviados con túnica blanca y un fajín azul, que es el color oficial de la cofradía, este fajín llevaba bordado en el frente un corazón con siete puñales. 

Desde el año 2001, actúa como camarera de la imagen de la Virgen de los Dolores, Antonia Marcos Campillo, que actualmente sigue siendo la encargada de esta tarea.

Desde 1978, todos los pasos que procesionan en Semana Santa habían creado su propio tercio de penitentes y los de la Dolorosa llevaban una capa, fajín y capuz azul, túnica blanca. Iban unidos al trono por un cable donde llevaban conectados los hachotes, para poder tener luz propia. Antes de la creación de los tercios, al costado de los cinco tronos que existían iban los pilareños andando en una fila a cada lado del paso. A partir del año de creación de los tercios, pasaron a estar las personas del pueblo estáticas en las aceras, viendo pasar los pasos.

En los años 60, antes de implantar los generadores de luz en los pasos, se ideó un sistema para conseguir la iluminación de las imágenes: del poco alumbrado público que existía en las calles de Pilar de la Horadada, se instalaron unos enchufes de cerámica, a los que se iban conectando los cables de los tronos. Esta técnica necesitaba ingentes cantidades de metros de cable, a modo de alargadera, para ir dando luz a cada trono, en todos los tramos donde desfilaba.

En 1996, la Cofradía de Nuestra Señora de los Dolores fue una de las siete fundadoras de la Junta Mayor de Cofradías y fue un verdadero aliciente para mejorar. Entonces comenzó a plantearse la idea de llevar el trono sobre hombros de costaleros. Así, en 1998, se fabrica un trono tallado en madera y se decide por acuerdo de la Junta Ejecutiva de la entidad, que fuera portado a hombros únicamente por mujeres. Debido a su gran tamaño, serían unas 70.

El paso de San Juan Apóstol y Evangelista, se crea en el año 1999, ya que tiempo antes de esa fecha, la familia Rosique Moya, había encargado al escultor Antonio García Mengual que tallase dos imágenes, una Virgen y otra de San Juan, basado en la tradición salzillesca. Así, con la imagen de San Juan, comenzó la agrupación masculina de costaleros de la Cofradía de Nuestra Señora de los Dolores.


La Cofradía siempre había anhelado la presencia de San Juan acompañando a la Virgen de los Dolores, ya que así queda reflejado en el Evangelio, en el que se dice que Juan fue el único apóstol que acompañó a la Virgen en el Calvario de su hijo y que Jesús se la otorgó como madre, para que la cuidase.
Ese primer año, el paso de San Juan procesionó con 28 hombres costaleros, ya que el trono iba iluminado con velones de cera. Un trono realizado por Sandalio e Higinio Martínez Hernández. Al año siguiente se le añadió cableado eléctrico y baterías, y así, los costaleros tuvieron que aumentarse.

La puesta en marcha de este nuevo paso para la cofradía se aceleró, ya que se había propuesto la creación de una nueva procesión, hoy ya consagrada en la tradición popular, como es el Encuentro en la Calle de la Amargura. En ella participarían Jesús Nazareno, la Virgen de los Dolores, la nueva imagen recién adquirida de la Mujer Verónica de la Santa Faz y el San Juan Evangelista de la Familia Rosique Moya. Es en marzo de 1999 cuando sale por primera vez a las calles de Pilar de la Horadada la procesión del Encuentro entre las cofradías de Nuestra Señora de los Dolores y Nuestro Padre Jesús Nazareno.
Costaleros del trono de San Juan Apóstol y Evangelista
Domingo de Resurrección
Año 2014

El estandarte que acompañó los primeros años a la imagen de San Juan Apóstol y Evangelista lo realizaron Teresa Torres y María Lucía Hernández, de manera artesanal y se bendijo el Viernes de Dolores de ese mismo año.

En abril de 2001, el Viernes de Dolores, que es cuando la cofradía celebra su onomástica, después de la Santa Misa, se bendijo el nuevo estandarte del paso de la Virgen de los Dolores y las medallas de los miembros de la Hermandad de San Juan Apóstol y Evangelista. Ese año, en la Procesión del Encuentro en la Calle de la Amargura del Miércoles Santo, acompañaron a la cofradía, su homologa de Beniel, ya que en febrero había sido la cofradía de Pilar de la Horadada la que había visitado este pueblo vecino.

En 2004 se encargó un trono tallado en madera para la imagen de San Juan Evangelista, obra de Manuel Ángel Lorente Montoya, del mismo estilo con el que procesiona la imagen titular, pero de menos tamaño, ya que la imagen de San Juan es de talla y no necesita tanto espacio.

La Hermandad de San Juan estrena en el año 2005 un estandarte de alto valor artístico, tanto por su diseño como por su laboriosidad y con gran peso. Fue diseñado por Salvador de la Cerra y elaborado en Cartagena. El estandarte al que se hace referencia se compone en su parte central por el águila de San Juan con una visión mística y elevada, y un libro abierto con los escritos santos de la Biblia, también aparece la Cruz de Malta, de la Orden de los Caballeros de San Juan de Jerusalén.

En el año 2006 se adquirieron varios objetos y enseres, entre ellos un nuevo manto para la Virgen de los Dolores, bordado en hilo de oro fino sobre terciopelo negro y rematado con una puntilla dorada, bendecido en abril de ese mismo año. Además de este objeto, se compraron ocho tambores e indumentaria para la Banda de Cornetas y Tambores, en color plata y oro, con las insignias de ambos pasos, el águila de San Juan y el corazón con los siete puñales de la Dolorosa. La indumentaria de la banda es camisa azul y cordón blanco.

La imagen gemela de San Juan, que la familia Rosique había adquirido junto a San Juan, estaba expuesta en su domicilio desde que se realizó en 1999 y en el año 2007, se decidió solicitar a los propietarios poder procesionar la misma en el Miércoles Santo, para sustituir y evitar deterioros en la imagen titular, la Virgen de los Dolores, hecho a principios de los años 40. Esta imagen fue nombrada como Nuestra Señora Consuelo de los Afligidos.


La Virgen de los Dolores original que procesiona el Viernes Santo, va ataviada con un vestido granate y un manto de terciopelo negro, bordados por hilo de oro, luciendo una corona de oro y en las manos un pequeño pañuelo blanco y un rosario. En el cinto, colgando una medalla del segundo titular de la cofradía, San Juan Apóstol y Evangelista y en el pecho un corazón atravesado por siete puñales. Sin embargo, el Domingo de Pascua de Resurrección, la imagen luce una túnica de color beige, bordada en dorado y lleva dos mantos, uno azul y otro negro encima del primero, ya que en el momento de encontrarse con Cristo Resucitado, se le cae el de color negro, quedando al descubierto el manto azul y abriéndose sus manos, con un mecanismo que le fabricó el escultor Sánchez Lozano, para recibir a su hijo.
Nuestra Señora de los Dolores
Viernes Santo

Nuestra Señora de los Dolores.
Domingo de Resurrección

La cofradía de Nuestra Señora de los Dolores es la que más salidas procesionales realiza, ya que sale tres veces en la Semana Santa de Pilar de la Horadada.

Las damas portapasos van ataviadas con pantalón y zapato negro, camisa blanca con botones azules y fajín azul. Los hermanos portapasos del mismo modo, pero sustituyendo el azul por el granate. Los nazarenos que acompañan a la Virgen de los Dolores o a la Virgen Consuelo de los Afligidos visten con vesta blanca, fajín, capa y capuz de color azul. Y los nazarenos que acompañan a San Juan, van con vesta granate, capuz y capa granate y cíngulo dorado.

Costaleras trono Nuestra Señora de los Dolores
Domingo de Resurrección
Año 2014

La cofradía tiene banda propia, de cornetas y tambores, y van vestidos con casaca azul marino, con bordes en otro tono de azul, con las insignias bordadas de las dos imágenes de la cofradía y hombreras de color oro. El fajín es del mismo color azul que los puños de las chaquetas. La banda se compone por una veintena de miembros. Durante los años que la banda ha existido, ha tenido varios cambios, tanto de vestuario como de miembros en su composición. En 2004, a propuesta de Joaquín Lucas, vuelven las cornetas, haciéndose él mismo cargo de la sección. Los tambores son dirigidos por Dalmacio Cárceles. Actualmente, la banda esta compuesta por cornetas, trompetas y tambores y dirigida por un grupo de jóvenes con inquietudes por mantener las tradiciones de la Semana Santa Pilareña.

Banda de cornetas y tambores Nuestra Señora de los Dolores
Domingo de Resurreción
Año 2014

Banda de cornetas y tambores Nuestra Señora de los Dolores
Anuncio de Cuaresma
Año 2025

En el año 2001, Purificación Pérez Villaescusa dio paso a Juan José Latorre Baño como presidente de la cofradía y a partir de 2018, ocupa el cargo de presidente José Ramón Sáez Garnés.